Bodegas Iturria

Bodegas Iturria en D.O. Toro

En San Román de Hornija, Valladolid, se encuentra Bodegas Iturria, dedicada a la elaboración de vinos especiales para acompañar sentimientos y emociones.

Una bodega cuyo principal objetivo es el de que sus altísimos estándares de calidad sean asequibles a todos los ámbitos de la sociedad.

La esencia del buen vino

Como parte de la propuesta de Bodegas Iturria está el poder contribuir a través de la enoexperiencia a una vida más rica, con derecho a sublimar sus momentos importantes. Es por ello que cada día la bodega se esmera para que su solo nombre sea sinónimo de la mayor calidad, reflejada en un buen vino.

Un vino que, desde esta filosofía, debe cumplir con dos criterios, uno que el vino sea el que le gusta beber a quien lo elabora y el otro que el vino ha de ser el fruto del gusto del entorno en el que nace y la semilla de lo que ha de ser ese gusto en el futuro.

De allí que es una aportación a la sociedad a nivel estético, emocional y pedagógico. Estético, porque aporta un profundo sentido de lo bello; emocional, porque supera la barrera de la razón y entra en el campo de los sentimientos y pedagógico, porque busca generar un aprendizaje social.

De esta manera cada vino va más allá de su estancia en vitrinas de los museos o en portadas de revistas, debe ser pensado para ser servido en las copas que animan una reunión entre amigos o que culminan el éxtasis de un brindis lleno de sentimiento. La verdadera razón de la enocreación, una vía para poner el vino al alcance de todas y de todos.

Así son los vinos Iturria, hechos con las variedades Tinta de Toro y Garnacha, obtenidas de viñedos cuyas edades oscilan entre los 20 y más de 100 años, según su ubicación. Vinos que surgen de un manejo biodinámico del suelo, en el que se usan pesticidas y fungicidas ecológicos:

• Tinto Iturria: un vino elegante, fino y con mucha personalidad; de color rojo cereza brillante; persistente en nariz, con unas notas sutiles de frutos rojos y especias y con unos taninos sumamente estructurados en boca.
• Valdosan: goloso en nariz y con sutiles toques a madera; de color rojo cereza brillante. En nariz es goloso, con toques a madera y aromas de frutos rojos y en boca potente y complejo, con mezcla de especias, ahumados y minerales.
• La Viña de Segundo: con una personalidad desenfadada, aunque no le falta carácter. Un vino amable y fresco; con un aroma de frutos rojos y unos taninos muy sutil y de color rojo cereza brillante. En nariz es fresco, con predominio de aromas de frutos rojos y un toque de vainilla.