Bodegas Pazo Cilleiro

Bodegas Pazo Cilleiro en D.O. Rias Baixas

Bodegas Pazo Cilleiro está ubicada en San Martiño, municipio de Meis, en el corazón de este entramado de suaves valles que desembocan en las rías.

Cercana al precioso Monasterio de Armenteira, de estilo románico gallego, testimonio histórico de la larga vinculación de estas tierras con la cultura de la vid, la bodega se dedica a crear extraordinarios vinos.

Para ello, Bodegas Pazo Cilleiro cuenta con pequeñas parcelas de viña repartidas a lo largo y ancho de toda la comarca del Salnés de las que obtiene las preciadas uvas de Albariño. Un conjunto de hectáreas de viñedo cuidadas por viticultores independientes, con los que se mantiene una estrecha y larga relación.

Vides que en su mayoría se cultivan en parral o pérgola, el sistema de conducción tradicional en la zona, el cual es idóneo para el desarrollo y la salud de la uva y para expresar las mejores cualidades de la variedad.

Además, Bodegas Pazo Cilleiro dispone de la tecnología e instalaciones necesarias para una vinificación de calidad mediante un proceso que incluye una selección y recolección en la viña, selección y obtención del mosto para ser fermentado y criado sobre lías finas para enriquecer los aromas propios de la uva.

Un vino con una profunda personalidad

Para la elaboración de su vino Pazo Cilleiro Albariño la bodega utiliza uvas de la variedad 100% Albariño, de 20 a 25 años de edad, cultivados en viñedos de calidad.

Tierras caracterizadas por un clima oceánico, con temperaturas medias suaves y precipitaciones muy altas y por suelos de origen granítico, ricos en cuarzo y de textura arenosa. Factores que permiten conseguir un producto que simboliza la unión de la naturaleza, la tradición y el espíritu de modernidad.

Un vino que representa la propia forma de entender las Rías Baixas, una plenitud de matices y sabores en una personalidad fresca y viva; destacando su color oro pálido muy vivo, con reflejos verdosos; nariz muy limpia y expresiva, con notas cítricas y de frutas blancas y aromas de pequeñas flores blancas. Y en boca muy fresco, ágil y redondo, con cierta estructura propia de la variedad y un final sabroso y persistente, con postgusto completo, refrescante y muy placentero.