Pago Heredad de Urueña ubicado a los pies de la villa medieval de Urueña, Valladolid es un proyecto integral desarrollado por la familia Rodríguez León, con el propósito de restaurar y recuperar una alquería castellana.
Se trata de un pago medieval que fue abandonado a causa de la filoxera y que la familia ha puesto nuevamente en valor desde el año 2005.
En este se encuentran los viñedos dedicados a las variedades autóctonas de Tempranillo, clones de Tinta de Toro y Tinta del País, que se completan en menor proporción con Syrah, Merlot y Cabernet. Una forma de recuperar en Urueña el cultivo de la vid y la elaboración de vinos.
El pago recuperado data de finales del siglo XVII, época en la que constaba de una casa de labranza, cuadras, palomar, lagar y bodega semi-enterrada, con bóveda de ladrillo y pilares de piedra.
Una finca considerada la parte central de una extensa viña en las laderas de la histórica villa de Urueña, la cual ocupaba parte del paraje denominado Pago de las Viñas.
Hoy día, cuenta con unas instalaciones modernas, en un edificio singular, elegante y representativo; dotadas con alta tecnología, que junto a los viñedos excepcionales, garantiza a Pago Heredad de Urueña poner en los mercados nacionales e internacionales vinos de alta y reconocida calidad.
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