En Santa Cruz de Tenerife se encuentra Presas Ocampo, una de las más modernas bodegas Canarias creada por Domingo López Arvelo quien con el conocimiento de la elaboración tradicional, las variedades locales y los adelantos tecnológicos decide poner en marcha este proyecto que busca obtener el vino que mejor recuerde al de antaño.
Una aventura que nació de las vivencias de Domingo desde su niñez junto a su familia cuyos ancestros ya se dedicaban a hacer los ricos vinos que en aquellos momentos eran casi como un lujo que no todos se podían permitir, un legado que sirvió para que este hombre amante del campo y del vino empezara a trabajar en los años 80 de nuevo por los vinos canarios.
Más adelante, a partir del año 1990 con la entrada en el Consejo Regulador Tacoronte-Acentejo la bodega tuvo el auge que la convirtió en una de las más importantes de la isla y con la mayor proyección.
Presas Ocampo elabora sus afamados tintos de crianza y los envejecidos en una bodega familiar de estructura sencilla típica canaria, con una arquitectura tradicional de la zona en la que destaca el soterramiento que permite enterrar la mayor parte de las instalaciones destinadas a la elaboración y maduración del vino.
Este tipo de construcción, sobre el nivel del terreno, favorece una estructura en forma de nave en la que se efectúa minuciosa y controladamente todo el proceso de obtención del vino, siempre buscando alcanzar la máxima calidad.
Asimismo, cuenta con varias hectáreas de viñedos en los mejores pagos y en las zonas más aptas para el cultivo de la variedad Tempranillo, plantados en laderas orientadas al norte tal que reciban las horas de sol necesarias para una óptima maduración.
Viñedos distinguidos por sus suelos muy ricos en minerales que aportan a los cultivos una tipicidad y complejidad única, sus laderas que pueden llegar a ser escarpadas, un clima atlántico con temperaturas suaves y medias y vientos alisios y frescos que benefician al cultivo y garantizan vinos con un potencial aromático, una buena acidez, más amplios, complejos y con mayor personalidad.
De esta manera la bodega obtiene las variedades Listan Negro, Negramolle y Castellana o Tintilla a partir de las cuales se consigue el vino Presas Ocampo, un vino limpio, redondo y elegante, de color rojo granate, con tonos violáceos, azulados y picota. Con ricos aromas primarios propios de la variedad Listán Negro y en boca una buena estructura en la que sobresalen los tonos florales y minerales.
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