En Alfáz del Pi, Alicante se encuentra ubicada Bodegas Enrique Mendoza, una empresa cuyo objetivo es hacer vinos que sean la expresión del sol, la luz, el carácter mediterráneo y la humanidad de la región.
Una labor que se realiza gracias a que desde sus inicios Enrique Mendoza apostó por las variedades foráneas y la variedad autóctona Monastrell. Lo que le ha permitido contribuir con la continuación de la historia del vino de Alicante, dominando todo tipo de variedades y conquistando el mundo entero.
Variedades que se mantienen en un viñedo que forma parte del entorno y del paisaje que rodea la bodega y que es intervenido de manera mínima para que viva otros siglos más; aportando la materia prima para la creación de los grandes vinos:
Rosado Monastrell, Monastrell-Merlot, Monastrell Cabernet, Finca Xaconero, Santa Rosa, Estrecho, Las Quebradas, Moscatel de la Marina, La Tremenda Sauvignon Blanc & Merseguera y La Tremenda Monastrell.
Para la creación de sus vinos Bodegas Enrique Mendoza cuenta con la Finca El Chaconero o “Las Tierras del Charco de Enero”, cultivada desde el S. XVI según los primeros documentos que hacen referencia al cultivo de la misma.
Un terreno cuyo nombre “Las Tierras del Charco de Enero” hace mención a la época en la que llovía tanto entre los meses de septiembre y octubre que las tierras permanecían embalsadas hasta enero.
El mismo está situado en la pedanía de Las Virtudes, junto al Santuario Virgen de las Virtudes, al oeste de Villena; sitio en el que destaca su edafología, con estratos del subsuelo que no se encuentran de forma horizontal sino oblicua dando como resultado una gran cantidad de parcelas de pequeño tamaño con suelos totalmente diferentes, en los que consigue cascajo, tierras areno-limosas y totalmente arenosas.
Por otra parte, la Finca está considera Zona de Especial Protección para las Aves debido a su importancia ambiental, por lo que es una superficie protegida incluida en la Red Natura 2000 de la Unión Europea.
Así, a 2 Km se encuentran las Lagunas de Villena, Espacio Natural Protegido que permite la observación de distintas especies a lo largo del año como son los Chorlitejos chicos, Cigüeñuelas, Buitrones, Alcaudones Reales, Terrenas marismeñas, Collalbas rubias o Abejarucos.
Un viñedo que es tratado con respeto, al igual que el entorno y todas las personas que hacen posible que esta bodega hoy día sea una empresa que elabora vinos excelentes en armonía con el suelo, la naturaleza y el clima del viñedo.
Una bodega que como parte de su crecimiento comparte con otras bodegas miembro de la asociación Grandes Pagos de España sus investigaciones, buenas prácticas y experiencias, apostando por un sector del vino más moderno.
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