Bodegas Joan de la casa

Bodegas Joan de la casa en D.O. Alicante

En la población de Benissa, en la comarca de la Marina Alta, al norte de Alicante se encuentra ubicada Bodegas Joan de la casa; una pequeña bodega familiar en la que Joan, su propietario, pone en práctica la experiencia y el conocimiento adquirido desde niño sobre el mundo del campo y del vino.

Una infancia que vivió entre viñas de la mano de su abuelo, Joan de la Casa, quien supo transmitir el amor por el campo a su pequeño nieto, manifestado en cada uno de sus vinos, los cuales introdujo en el mercado en el 2013, después de varios años de producción.

Es así como actualmente la bodega elabora vinos de calidad, respetando siempre la tierra y la viña, con el fin de obtener la máxima expresión y personalidad de las variedades autóctonas y características del clima de la comarca de la Marina Alta, muy influenciado por el mar Mediterráneo.

Un entorno único, con un suelo de características peculiares y únicas, formado por capas sedimentarias de fondo marino, con un alto contenido de caliza y estratos de piedras de “tap” y piedras “fiter”; que favorecen el cultivo de las viñas con las variedades autóctonas de la zona Moscatell de Alejandría y Giró.

Una bodega comprometida con el ambiente

En cuanto a la elaboración de sus vinos Joan de la Casa es una bodega respetuosa, selectiva e innovadora; aspectos que se reflejan en la manera de abordar la viticultura y la forma de entenderla, donde lo prioritario es el cuidado del ecosistema, el aire, la tierra, la fauna y la viña.

De allí que su filosofía es romper con la viticultura moderna o industrializada, estableciendo como principal condición el cuidado de la tierra y los viñedos, con la finalidad de crear un ecosistema donde las viñas tengan su propio equilibrio, vigor y defensas, sin necesidad de ningún tratamiento o, de ser necesario, los mínimos y autorizados por la agricultura ecológica.

Para ello, se hace un trabajo minucioso que comienza en el propio campo, cuidando de forma especial a las viñas para obtener los mejores frutos, decidiendo el momento óptimo de recolección y efectuando la vendimia manualmente.

Asimismo, en la bodega no cabe la necesidad de introducir ningún aditivo en el proceso de elaboración como levadura, proteínas, enzimas, bacterias u otros. De allí que la fermentación se realiza por las levaduras autóctonas, con lo que se consiguen vinos naturales que son máxima la expresión del terruño y de las variedades autóctonas.

De esta forma la bodega ha cambiado el concepto de tratamientos químicos por tratamiento físicos, ofreciendo al público sus vinos Tinto Terra Fiter 2012; Blancos Nimi Moscatel 2013, Nimi Moscatel 2015 y Nimi Tossal Moscatel 2015 y Dulce Nimi Naturalment Dolç Moscatel 2016.