Bodegas Rodríguez y Sanzo

Bodegas Rodríguez y Sanzo, Una familia, Siete D.Os

En Bodegas Rodríguez y Sanzo, la viticultura es un arte y su intención de demostrarlo en cada uno de sus caldos, se cumple con la elaboración de vinos que evocan emociones y potencian los sentidos.

Fundamentada en esta filosofía, la bodega logra capturar la esencia del vino en sus botellas, a través de los métodos de elaboración adecuados y los procedimientos de cultivos indicados, pero que también son respetuosos con el medio ambiente, logrando capturar y reflejar la completa identidad de su tierra.

Es así como los viñedos de Rodríguez y Sanzo, cuentan con un trato especial y un cuidado único, que pretende con el mayor respeto, extraer el completo potencial de los cultivos y con ello, el máximo desarrollo de las uvas. Mientras tanto, dentro de la bodega, también se trabaja con medios de producción y métodos que toman en cuenta el cuidado a la fruta, aplicando técnicas que no interfieran con la calidez, el trato y las raíces, para elaborar productos que vayan mucho más allá.

Así, esta bodega familiar se ha proyectado desde su origen, con el objetivo ambicioso e inconformista de llevar sus caldos mucho más alto y mucho más lejos, lo que las ha llevado a conseguir un nivel de perfeccionismo que se ha convertido en su principal característica.

La bodega y sus denominaciones de origen

Desde su origen, Bodegas Rodríguez y Sanzo, se planteó el poder elaborar en sus espacios el mejor vino posible. Así, sin importar el lugar, la bodega ha logrado descubrir las diferentes cualidad y bondades de los distintos suelos, y aplicar los secretos adecuados para cada una de las 7 denominaciones de origen en las que Rodríguez y Sanzo está presente.

En las 130 hectáreas de viñedos propios de la bodega, se trabaja con una dedicación y esfuerzo asombroso, que permite desarrollar vinos excepcionales en cada una de las D.O.: Ribera del Duero, Rioja, Priorat, Bierzo, Rias Baixas, Rueda y Toro.