La Bodega Ferrer Bobet nace en el año 2002, entre Falset y Porrera, una de las áreas más frescas del Priorat; influenciada por los vientos del noreste, con un tenue efecto moderador del Mediterráneo y una topografía determinada por la presencia de varios de los viñedos ubicados a más altura y con mayor pendiente de la denominación de origen.
Es en esta mágica tierra donde los amigos Sergi Ferrer-Salat y Raül Bobet inician un recorrido por el mundo del vino, para hacer realidad un sueño que nació con la llegada del nuevo siglo, en un entorno natural que posee unas particularidades excepcionales para la viticultura.
Se trata de una tierra cuyas características permiten crear condiciones térmicas muy particulares entre el día y la noche, garantizando una óptima maduración fenólica y la preservación de la acidez, el frescor y los aromas.
Aunado a ello, las variadas orientaciones de los viñedos constituyen una rica diversidad de mesoclimas que ofrecen la posibilidad de crear vinos de una exclusiva complejidad y elegancia; en los que predominan suelos compuestos de forma casi exclusiva de pizarra, la singular llicorella, que sólo los mejores pagos del Priorat poseen, y que favorecen enormemente a la inconfundible personalidad de los vinos.
Todas estas cualidades están presentes en los viñedos privilegiados de los que proceden las viñas centenarias de Cariñena y Garnacha Tinta, con cuyos propietarios se mantiene una relación de amistad, aprecio y respeto.
A esto se suman los viñedos propios de Ferrer Bobet, que fueron plantados en los alrededores de la bodega, en los años 2004 y 2005, con Cariñena, Garnacha Negra, Syrah, Cabernet Sauvignon, Viognier y Roussan. De esta manera la uva de estos viñedos junto a la de otras excepcionales viñas jóvenes de los alrededores de Porrera, se convirtió en el vino Ferrer Bobet.
Uno de los principales valores de Ferrer Bobert es el respeto que ha mantenido a lo largo de su historia por la biodiversidad presente en los viñedos, el desarrollo económico y social de esta comarca del sur de Cataluña, el respeto mutuo entre dos viejos amigos y el respeto por las personas que buscan un Priorat que refleje con pureza y armonía la esencia mineral de estas tierras.
Es esta filosofía propia de Ferrer Bobet, la que se manifiesta en los dos primeros vinos, Ferrer Bobet Vinyes Velles 2005 y Ferrer Bobet Selecció Especial Vinyes Velles 2005, elaborados con algunas de las viñas más viejas del Priorat.
Una filosofía que ha permitido garantizar que el entorno siga su ciclo vital con la mínima injerencia humana, ejerciendo una viticultura orgánica real, sin el uso de ningún tipo de herbicida ni de insecticida. Un respeto y admiración por el medio ambiente que además se manifiesta en el diseño del edificio de una bodega internada entre viñas, que se confunde con el paisaje para dar paso a una nueva bodega que elabora vinos de calidad a partir de una viticultura orgánica y unas instalaciones modernas y grandiosamente concebidas.
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