López Campos

López Campos en D.O. Méntrida

Situada en Valmojado, Toledo se encuentra López Campos, una bodega familiar que busca conseguir la máxima calidad en sus vinos.

Sus orígenes se remontan a principios del siglo XX cuando los abuelos Paulino López y Francisco López (abuelo Kiko), ambos viticultores, sufrieron la plaga de la filoxera. Fue entonces, cuando el abuelo Kiko plantó su primera viña en 1919 con portainjertos americanos y en 1921 la injertó con sarmientos que compró a unos podadores quienes le dijeron que era tinta aragonesa, naciendo así la que hoy día es la viña más vieja, de Garnacha Tinta.

De esta manera, los abuelos comenzaron a elaborar y vender el mejor vino en bodegas caseras con estrujadoras manuales de rodillos, bombas java manuales, tinajas de barro, prensas verticales manuales y artesanía en estado puro, todo esto hasta la década de los 60.

Posteriormente, la segunda generación de la familia, Paulino y Alicia, retoma el proyecto Almavid y con su esfuerzo mantienen y mejoran los tesoros de viñas heredadas de sus antepasados. Además, esta tradición vitícola cuenta con una antigua bodega de Valmojado puesta en funcionamiento, que conserva lo que en el pasado fue y está adecuada a los nuevos tiempos, con el fin de crear los fabulosos vinos ecológicos y con personalidad, que sorprenden.

Un espacio en el que las uvas se trasforman en finos caldos, con un seguimiento constante y cuidadoso a lo largo de todas las fases del proceso desde la viña hasta la bodega donde se combinan la herencia de barro con el acero inoxidable.

Viñas ecológicas para crear vinos en armonía con la naturaleza

López Campos dispone para la producción de sus vinos de viñedos localizados en el norte de Toledo, influenciados por la sierra de Gredos, entre los ríos Alberche y Guadarrama, a una altitud media de 670 metros, con clima continental de escasa pluviometría y unos suelos profundos y especiales.

Viñedos en los que la intervención es mínima al igual que en la bodega, con el propósito de embotellar la esencia de la tierra, captada por las raíces de las vides. Hectáreas con certificación ecológica, distribuidas en varias parcelas, lo que hace que cada viña sea singular y única; destacándose la viña centenaria, de la que se elabora el Almavid Garnacha Crianza.

Viñas que por ser ecológicas, son vigiladas constantemente, para prevenir enfermedades y limitar la hierba; respetando la naturaleza tal que la propia vid convive con aliados como la mariquita:

Fuente Ignacio, viña Centenaria de Garnacha Tinta, plantada en 1919; Moratejo, viña de Garnacha Tinta, plantada en 2015 con cuatro clones diferentes; El Soto, Camino Alto, cultivado con la variedad Syrah en el año 2015, un clon Australiano de excelente fruta; Camino Toledo Postura, injertado con Garnacha Tinta en 1983.

Así como, Sotillo, viña injertada con Tempranillo en 1999; La Casa Monroy, viñas de Garnacha Tinta 1951; Camino Toledo Viña, con Garnacha de 1928 y Los Barranquillos, viña de espectaculares cepas plantadas en 1932 con varietales blancos Airen, Albillo, Jaen y Malvar.

Un conjunto de viñas cultivadas con la finalidad de elaborar los vinos Almavid únicos y exclusivos: Blanco Ecológico 2020, Rosé Ecológico 2020, Garnacha Ecológico 2020 Roble, Garnacha 2014 Crianza, Syrah 2014 Crianza, Garnacha 2015 Crianza y Almavid Garnacha Ecológico 2018 Roble.