Bodega Casa la Viña

Bodega Casa la Viña en D.O. Valencia

En el año 1882 fue construida Bodega Casa la Viña en Requena, Valencia por Fidel García Berlanga, con el propósito de elaborar vinos con producciones bastante bajas, pero de un alto nivel cualitativo.

Para ello cuenta con viñedos caracterizados por un clima de tipo mediterráneo continental y suelos de carácter arcillo calcáreo, con un equilibrio entre arenas y arcillas, que facilita el drenaje cuando llueve en abundancia y la retención de agua en épocas de sequía; lo que favorece el cultivo de la vid.

Artesanos de la tierra

Casa la Viña es una bodega que destaca por ser 100% agricultura ecológica y biodinámica, tal que sus vinos son el reflejo de la tierra que los ha visto nacer.

Es por eso que se practica una agricultura de secano siguiendo los criterios de la biodinámica que establece un sistema de cultivo en el que la prioridad es el equilibrio del ecosistema y la biodiversidad en el viñedo.

Razón por la cual, los vinos se elaboran respetuosos con el paisaje del que son originarios, cultivando las variedades Bobal y Macabeo plantadas por los antepasados, sin herbicidas ni insecticidas, sólo con elementos de origen natural; tal que se expresen las singularidades del paisaje a través de los vinos:

• Món Montesanco Bobal: vino de color rubí; con aroma a frutas rojas maduras junto con notas balsámicas mediterráneas como la lavanda. En boca las bayas negras y rojas así como las notas de higo. Un vino con mucha presencia, redondo con taninos suaves y fondo mineral con una buena acidez.
• Slow Mon Montesanco Bobal: caldo de color rojo picota brillante con ribete violáceo. En nariz aromas afrutados de bayas maduras como fresas, frambuesas y cassis, con notas especiadas y balsámicas del bosque mediterráneo y unas ligeras notas tostadas del roble. En boca muy sabroso, recorrido afrutado, taninos suaves y ligeros recuerdos a vainilla con un final elegante.
• Món Montesanco Macabeo: con un color amarillo pálido, aromas frescos varietales con notas cítricas y lácticas y flores blancas; con una acidez equilibrada y sensaciones untuosas. Un vino con cuerpo, persistencia y final mineral.
• Cava Món Macabeo Brut Nature Reserva: de color dorado amarillo intenso; nariz intensa, muy expresiva, aromas florales, de fruta blanca confitada, de nueces, especies y en boca muy cremoso, con un paso sutil y elegante, acidez balanceada y un post gusto muy largo.
• Món Montesanco Tempranillo: de color rubí brillante con ribete granate y agradables aromas de frutos del bosque maduros con notas balsámicas y de vainilla, regaliz y chocolate. En boca un vino con cuerpo y bien redondeado con taninos suaves y final largo.