Bodegas Tunte

Bodegas Tunte en D.O. Gran Canaria

En San Bartolomé de Tirajana, Las Palmas fue creada Bodegas Tunte en el año 1998 como resultado de la pasión por la crianza de los vinos y los valores de una empresa familiar que combina tradición con tecnología de punta para producir vinos de calidad.

Una bodega fiel a su filosofía, lo que se evidencia con la incorporación de Alberto González Plasencia, el segundo mejor enólogo de España, un experto que ha contribuido en la mejora y consolidación de la calidad de los vinos de Gran Canaria y en llevar el nombre de la bodega hasta lo más alto en el mundo vinícola de estas islas.

La trayectoria profesional de Alberto empezó a sus 19 años, destacándose por su curiosidad, creatividad y personalidad pasional y entregada. Cualidades que le han permitido llegar con sus vinos a muchos rincones del mundo, siendo reconocido por importantes premios a nivel internacional.

Posteriormente, a partir del año 2014 la segunda generación de la familia asume la gestión de la bodega dando un giro a la imagen corporativa, comenzando así su etapa con las variedades de tintos Listán negro, Tintillo y Castellano; ampliándolas a las variedades blancas Malvasía volcánica, Verdello, Albillo, Moscatel y Pedro Ximénez.

Viñedos privilegiados, una fuente natural de grandes vinos

Bodegas Tunte cuenta con viñedos de una belleza incomparable situados en el corazón de Gran Canaria, en la zona del barranco de Las Tirajanas en Tunte, caracterizados por su orientación norte-sur y su clima de montaña y medianías.

Además, forman parte de la categoría a nivel mundial de vinos heroicos pues están ubicados a una altitud de 900 metros, con un suelo formado por tierra natural que contiene picón en la línea de la parra y con un tiempo frecuentemente soleado.

Factores que favorecen el cultivo de las variedades Malvasía volcánica, Verdello, Albillo y Moscatel, las cuales son vendimiadas y recolectadas de forma manual para conseguir los grandes vinos:

• Oro Blanco: un vino que no deja indiferente y se convierte en la excusa perfecta para confesar secretos. De color amarillo pajizo, claro y limpio y aroma a notas de fruta madura y cítricos. En boca muestra un grado de acidez que alarga las sensaciones frutales, con longitud envolvente, graso y ligero contrapunto de amargor.
• Berode: un vino aromático y alegre, para disfrutar cerca del mar en la compañía de familia y amigos. Con una alta intensidad aromática a lichi, pera y guayaba; color amarillo pajizo, claro y limpio y en boca ligero y fácil de beber.
• Valara: una botella de la que emerge una golosina suculenta y sensual; con ares de miel y brisa entre pálidas flores. Un vino dorado y limpio, de alta intensidad aromática a flores blancas, miel y almendra.con sabor intenso, apetecible y dulce.
• Serín: representa a ese pajarillo que cada verano se cobija y alimenta a la sombra de estas viñas viejas de Moscatel de Alejandría, variedad que aporta aromas intensos junto a flores blancas, cítricos, hierbas aromáticas y fruta de hueso. De color amarillo limón, denso, limpio y muy brillante y en boca es fresco, agradable, de gran estructura y potencia, con toques amargos y tánicos que le dan una gran complejidad.